Hoy celebramos a San Daniel Comboni. Nació en Italia el 15 de Marzo de 1831, hijo de Luis Comboni y Domenica Pace, quienes era campesinos pobres. Era el cuarto de ocho hijos, de los cuales él fue el único que sobrevivió a una edad adulta.
A los doce años, lo enviarón a estudiar a Verona y fue ahí donde estudió medicina e idiomas. El 31 de diciembre de 1854, fue ordenado sacerdote en Trento. Después de hacer un peregrinaje a Tierra Santa se fue a Africa junto con otros cinco misioneros.
Meses después, tenía la misión de liberar a niños y niñas que eran esclavos. Se enfrentó a muchas dificultades, incluyendo un clima insoportable, enfermedades, y la muerte de sus compañeros misioneros. Así como la pobreza y condiciones deplorables que enfrentaba la población. Aún así, él se mantenía firme en su convicción de cumplir su trabajo misionero.
Él tuvo que regresar a Verona depués de una plaga de malaria. Ahí fue professor por algunos años, pero continuaba buscando maneras de enviar misioneros a Africa. Creó un proyecto misionero que tenía como cita lema “Salva Africa por medio de Africa”.
En 1867 fundó el instituto masculino Misioneros Combonianos y en 1872 fundó el Instituto misionero Misioneras Combonianas. En 1877 fue nombrado Vicario Apostólico de Africa Central y un mes después fue consagrado primer Obispo de Africa Central.
San Daniel sufrió en cuerpo y espíritu, junto con sus misioneros y misioneras, las sequías, la lucha contra la esclavitud, y hasta acusaciones infundadas. Pero siempre se mantuvo fiel y actualmente, los misioneros Combonianos continuan trabajando en obras misioneras.
San Daniel Comboni ruega por nosotros.