“Amado Jesús, bueno y bondadoso; obediente y siempre generoso,
Tú desde pequeño has predicado la palabra de tu padre y la has sabido llevar a todos lados,
a donde tu corazón te indica; tú que eres el salvador hijo de la Virgen María,
nunca has reprochado nada a tu padre y has llevado su amor como tu escudo.
Hoy en mi nombre y el nombre de todos los jóvenes del mundo,
pido por mí y por ellos,
para que cada lugar donde se encuentre un joven hoy pueda glorificarte
y que a pesar de los problemas del mundo sepa distinguir lo que está bien y lo que no,
y tú, que siempre estás al lado de todos, nos otorgues tu bendición.
Padre, tu eres el guía de la juventud,
mi juventud, la que vivo hoy y todos los días,
tú eres la más grande prueba de amor verdadero y puro,
de amor cálido y fraternal, sé que tu misericordia es eterna y decido refugiarme en ti;
Señor tu eres bueno, bondadoso, único, amoroso,
eres el protector de toda la humanidad y guía de todos los jóvenes,
Confió y creo en tu inmensa misericordia y amor,
Por los siglos de los siglos,
Amén.”
Fuente: Paraiso de Oracion
¡Padre Santo! te pedimos por los jóvenes,
que son la esperanza del mundo.
No te pedimos que los saques de la corrupción
sino que los preserves de ella.
¡Padre! No permitas que se dejen llevar
por ideologías mezquinas.
Que descubran que lo más importante
no es ser más, tener más, poder más,
sino servir más a los demás.
¡Padre! Enséñales la verdad que libera,
que rompe las cadenas de la injusticia,
que hace hombres y forja santos.
Por en cada uno de ellos, un corazón universal
que hable el mismo idioma,
que no vea el color de la piel,
sino el amor que hay dentro de cada uno.
Un corazón que a cada hombre le llame hermano,
Y que crea en la ciudad que no conoce las fronteras,
Porque su nombre es universo, amistad, amor, Dios.
¡Padre Santo! Cuida a nuestros jóvenes.
Amén.
Fuente: Catholic.net
Señor, aquí estoy otra vez ante Ti
Para pedirte que me perdones
Si en algo te he ofendido
Olvidándome de cuánto me quieres
Sin pensar que siempre me estás viendo
Perdón, Jesús
Gracias porque siempre
Estás aquí conmigo
Para escucharme y perdonarme
Te pido por los jóvenes, que como yo
A veces no sabemos valorar
Cuanto nos das sin merecerlo
Te pido sabiduría y entendimiento
Para poder comprender
Cuál es tu voluntad
Te pido que los jóvenes de hoy
Sigan tu camino
Como estoy tratando de seguirlo yo
Para que mañana que seamos adultos
Seamos mejores personas y agradarte más
Ayúdame a seguir el ejemplo de San Gerardo
Que siendo muy joven
Se fue para alabarte y bendecirte
Más cerca en el cielo
Pero que en la vida tan corta
Que tuvo en esta tierra
Logró ser un modelo
De obediencia y humildad
Para los jóvenes y los niños.
Gracias Señor por la Juventud
Y la alegría que nos da tu amor
Que es la gasolina
Que prende nuestro corazón
Eres la luz en la oscuridad
Eres lo más grande y bello que puede existir
Y cuando estoy así, tan en confianza contigo
Ya no tengo ganas de pecar más.
Ayúdame a quererte más, a creerte más
Que este amor que ahora siento por ti
No se apague jamás.
Amén